Oasis
De The Rain a los primeros sueños mancunianos
Antes de convertirse en símbolo del britpop, Oasis fue apenas un grupo de amigos de Burnage, un suburbio de Manchester donde la música funcionaba como escape y redención. En 1991, Paul “Bonehead” Arthurs, Paul McGuigan, Tony McCarroll y Chris Hutton formaron una banda llamada The Rain, influenciada por el sonido psicodélico de los sesenta y la crudeza post-Madchester que aún flotaba en la ciudad. Poco después, Hutton abandonó el proyecto y su lugar lo ocupó Liam Gallagher, cuya voz áspera y magnética cambiaría el rumbo del grupo.
Inspirados por un póster de la gira de Inspiral Carpets, decidieron rebautizarse Oasis, un nombre que evocaba una mezcla de escape y ambición. Fue Noel Gallagher, hermano mayor de Liam, quien se sumó en 1992 tras volver de una gira como técnico de guitarra para los Inspiral. Noel impuso una condición clara: él escribiría las canciones y guiaría el rumbo artístico. Esa decisión marcó el inicio de una alianza creativa y conflictiva que definiría todo el mito Gallagher.
Durante 1992 y 1993, Oasis comenzó a tocar en pubs locales y pequeños clubes de Manchester, como Boardwalk, donde su energía en directo llamó la atención del productor y mánager Alan McGee, fundador de Creation Records. Tras un concierto particularmente explosivo en mayo de 1993, McGee los fichó casi de inmediato para su sello.
El nacimiento de Definitely Maybe
El grupo entró a grabar su primer single, “Supersonic”, en The Pink Museum Studios de Liverpool con producción de Mark Coyle y Owen Morris. Publicado el 11 de abril de 1994, el tema alcanzó el puesto número 31 en el UK Singles Chart, suficiente para que la prensa comenzara a notar algo distinto en esa nueva banda mancuniana. Con “Shakermaker” y luego “Live Forever”, el grupo fue afinando su identidad sonora: guitarras expansivas, melodías contagiosas y un espíritu que unía arrogancia y redención.
En agosto de 1994 llegó su esperado debut, Definitely Maybe, editado por Creation Records y producido por Owen Morris junto a Mark Coyle. El álbum se grabó en un proceso caótico que pasó por varios estudios, incluyendo Sawmills Studios en Cornualles, pero su resultado fue un manifiesto de confianza absoluta.
Con canciones como “Rock ’n’ Roll Star”, “Cigarettes & Alcohol” y “Slide Away”, el disco capturó la esencia del optimismo obrero británico de los noventa. Alcanzó el número 1 en el UK Albums Chart, convirtiéndose en el debut más rápidamente vendido en la historia del Reino Unido hasta ese momento.
Las críticas fueron unánimes: medios como NME y Q Magazine lo celebraron como la llegada de una nueva era. La banda ya no era solo una promesa local: era la voz de toda una generación que buscaba recuperar el orgullo cultural británico frente al dominio estadounidense del grunge.
La conquista del mundo britpop
El éxito de «Definitely Maybe» fue solo el comienzo de una transformación cultural. A lo largo de 1995, Oasis pasó de ser un fenómeno local a convertirse en la banda más influyente del Reino Unido. En el centro de esa revolución estaba Noel Gallagher, quien se recluyó en la escritura de nuevas canciones durante la gira del debut, decidido a llevar la ambición melódica del grupo a un nuevo nivel.
El resultado fue (What’s the Story) Morning Glory?, grabado entre mayo y junio de 1995 en los Rockfield Studios de Monmouth, Gales, bajo la producción de Owen Morris y Noel Gallagher. Publicado el 2 de octubre de 1995 por Creation Records, el disco ofrecía un sonido más accesible y expansivo, centrado en la fuerza de las canciones antes que en el ruido de las guitarras. Su primer adelanto, “Some Might Say”, había llegado en abril al número 1 del UK Singles Chart, consolidando el estatus de la banda como el estandarte del britpop.
Sin embargo, fue “Wonderwall” la que los transformó en un fenómeno mundial. Publicado el 30 de octubre de 1995, el single llegó al número 2 en Reino Unido y al número 8 en el Billboard Hot 100, convirtiéndose en la canción británica más reconocible de la década. También “Don’t Look Back in Anger” y “Champagne Supernova” se volvieron clásicos inmediatos, con melodías que trascendían las fronteras del género.
El álbum debutó en el número 1 del UK Albums Chart y alcanzó el número 4 en Estados Unidos, vendiendo más de 20 millones de copias en todo el mundo. La crítica lo celebró como un triunfo de confianza y espíritu popular: NME lo describió como “una obra maestra para la clase trabajadora británica”.
Knebworth y el apogeo de Oasis
El impacto cultural fue aún mayor cuando Oasis encabezó los históricos conciertos en Knebworth Park, los días 10 y 11 de agosto de 1996. Más de 250.000 personas asistieron a los dos shows, un récord sin precedentes que simbolizó el punto máximo del britpop y el dominio absoluto de la banda. Las entradas se agotaron en menos de un día, con más de dos millones de solicitudes registradas: una cifra que hablaba por sí sola sobre el alcance generacional del grupo.
Pero la fama también amplificó las tensiones internas. La rivalidad entre los hermanos Gallagher, alimentada por los tabloides y por el choque constante de egos, se volvió parte inseparable de la narrativa de Oasis. Mientras Liam se consolidaba como un frontman carismático e impredecible, Noel asumía el control artístico con una visión cada vez más perfeccionista.
Al cierre de 1996, Oasis había conquistado el mundo. Desde las calles de Burnage hasta los escenarios más grandes del planeta, el grupo ya no representaba solo un movimiento musical, sino una identidad británica en su máxima expresión. El siguiente paso, sin embargo, pondría a prueba los límites de su propio mito.
Entre excesos y épica
Tras el fenómeno global de (What’s the Story) Morning Glory?, Oasis entró a 1997 cargado de expectativas monumentales. La presión por superar un éxito histórico y la fama desbordante crearon un ambiente de tensión y exceso dentro de la banda. A pesar de ello, Noel Gallagher comenzó a escribir un repertorio que buscaba capturar la grandiosidad de su posición en la cima del britpop.
El resultado fue Be Here Now, grabado entre enero y abril de 1997 en los Abbey Road Studios y los Ridge Farm Studios de Surrey, con producción de Owen Morris y Noel Gallagher. La intención era crear un álbum expansivo y monumental, reflejando la ambición de la banda en cada acorde y arreglo. Con guitarras superpuestas, capas de teclado y percusión prominente, el disco aspiraba a consolidar a Oasis como leyenda viva del rock británico.
Publicada el 21 de agosto de 1997 por Creation Records, la obra debutó directamente en el número 1 del UK Albums Chart, convirtiéndose en el álbum más rápidamente vendido en la historia británica hasta ese momento. El primer single, “D’You Know What I Mean?”, alcanzó el número 1 en Reino Unido y consolidó el dominio de la banda en la radio y en las listas de éxitos. Le siguieron “Stand by Me” y “All Around the World”, este último notable por su duración y ambición orquestal, reforzando la idea de un Oasis en plena euforia creativa.
La recepción crítica fue mixta. Mientras algunos medios elogiaron la audacia y el sonido épico del disco, otros criticaron su exceso de producción y su larga duración, argumentando que las canciones podían sentirse saturadas.
La era dorada de los lados B
En noviembre de 1998, cuando Oasis ya había conquistado el mundo con «Definitely Maybe», (What’s the Story) Morning Glory? y «Be Here Now», la banda decidió mirar atrás y celebrar la magnitud de su repertorio oculto. The Masterplan, publicado el 2 de noviembre de 1998 bajo Creation Records, reunió doce caras B que, lejos de ser material descartable, mostraban la amplitud creativa del grupo durante su primera etapa. Canciones como «Acquiesce», «Half the World Away», «Talk Tonight» o «The Masterplan» revelaban una profundidad melódica y emocional que muchos críticos consideraron digna de un álbum propio.
El disco funcionó como una suerte de cápsula del tiempo: un repaso de los días en que Noel Gallagher escribía con una inspiración inagotable, dejando fuera de los álbumes oficiales canciones que otras bandas habrían dado por joyas principales. Producido por Owen Morris y Noel Gallagher, el álbum confirmó la extraordinaria calidad de los lados B que acompañaban los singles de los primeros tres discos. La presencia de «The Masterplan», con su orquestación cinematográfica y tono casi filosófico, simbolizó la ambición artística del grupo antes de los excesos del final de la década.
La recepción fue entusiasta. «The Masterplan» alcanzó el número 2 en las listas británicas y recibió elogios por consolidar el mito de Oasis como una banda capaz de convertir hasta su material “secundario” en clásicos. Con el tiempo, el álbum se convirtió en pieza esencial para entender la etapa de esplendor del grupo, y su título pasó a representar algo más amplio: la convicción de Noel Gallagher de que, incluso en los márgenes, había un plan maestro detrás de cada acorde.
Reinventarse tras la euforia
Después de los excesos y la épica de Be Here Now, Oasis entró en la segunda mitad de la década de los 90 enfrentando un desafío creativo y personal: mantenerse relevantes sin repetir fórmulas. Tras la salida de Bonehead y Guigsy, el grupo incorporó a Gem Archer y Andy Bell, completando una nueva alineación que aportaría frescura y nuevos matices a la banda.
El resultado de esta transición fue Standing on the Shoulder of Giants, publicado el 28 de febrero de 2000 bajo Big Brother Recordings. La producción estuvo a cargo de Noel Gallagher junto a Mark “Spike” Stent, y las sesiones se realizaron en los Olympic Studios de Londres y en los Hansa Studios de Berlín. El disco exploró sonidos más experimentales, incorporando efectos electrónicos, sintetizadores y una paleta más amplia de texturas que marcaba un giro respecto a los clásicos riffs de guitarras del grupo.
El primer sencillo, “Go Let It Out”, publicado en febrero de 2000, debutó en el número 1 del UK Singles Chart, reafirmando que la banda seguía dominando el mercado británico. Otros sencillos, como “Who Feels Love?” y “Where Did It All Go Wrong?”, mostraron una faceta más introspectiva y psicodélica de Oasis, con letras que reflejaban tanto la madurez de Noel Gallagher como la búsqueda de identidad de la banda tras los cambios de alineación.
La recepción crítica fue mixta: mientras algunos medios alabaron la experimentación y el riesgo asumido, otros señalaron que la falta de cohesión estilística debilitaba el impacto de algunas canciones. Aun así, Standing on the Shoulder of Giants debutó en el número 1 del UK Albums Chart, fue certificado platino en el Reino Unido y logró consolidar a Oasis como un grupo dispuesto a reinventarse sin perder su sello característico.
Renovación y cohesión
Tras la experimentación de Standing on the Shoulder of Giants, Oasis volvió a sus raíces de britpop con Heathen Chemistry, publicado el 1 de julio de 2002 por Big Brother Recordings. La grabación se realizó principalmente en los Olympic Studios de Londres, bajo la producción de Owen Morris, quien había trabajado en los discos clásicos de la banda, aportando consistencia y un sonido más orgánico que buscaba reconciliar a críticos y fans con la esencia original de Oasis.
Este séptimo álbum reflejó un enfoque más colaborativo dentro del grupo. Por primera vez, miembros como Gem Archer y Andy Bell contribuyeron con composiciones propias, mientras que Liam Gallagher participó activamente en la escritura de varios temas. El resultado fue una obra equilibrada que combinaba la energía guitarrera característica de la banda con melodías más pulidas y arreglos menos cargados que los de Be Here Now.
El primer single, “The Hindu Times”, publicado en abril de 2002, debutó directamente en el número 1 del UK Singles Chart, un reflejo de la sólida base de seguidores que mantenía la banda. Otros sencillos, como “Stop Crying Your Heart Out”, “Little by Little” y “Songbird”, consolidaron la diversidad del álbum, abarcando desde himnos expansivos hasta baladas introspectivas, y mostrando un Oasis más maduro y versátil.
La crítica recibió el disco de manera positiva, destacando la capacidad de la banda para reinventarse sin perder su identidad. Heathen Chemistry debutó en el número 1 del UK Albums Chart, fue certificado platino en el Reino Unido y obtuvo buenas posiciones en las listas de Europa y Japón. La gira que siguió al lanzamiento confirmó que Oasis seguía siendo un atractivo central en festivales y estadios internacionales, manteniendo intacta la conexión con su público tras casi una década de carrera.
Retorno a la esencia
Tras la etapa experimental de Heathen Chemistry, Oasis buscó en 2005 recuperar la energía cruda y melódica que había definido sus primeros años, pero con la madurez adquirida en más de una década de carrera. El grupo se encerró en los Wool Hall Studios de Beckington, bajo la producción de Dave Sardy, conocido por su trabajo con Jet y The Dandy Warhols, con el objetivo de lograr un sonido directo y potente que volviera a conectar con la esencia del britpop clásico.
El séptimo álbum de estudio, Don’t Believe the Truth, fue publicado el 30 de mayo de 2005 por Big Brother Recordings y mostró una banda más equilibrada en su dinámica interna. Noel Gallagher recuperó la centralidad compositiva, pero también se abrió espacio para canciones de Liam Gallagher, Gem Archer y Andy Bell, aportando variedad y frescura al repertorio. Esta colaboración fortaleció la cohesión del grupo y renovó la creatividad tras los cambios previos de alineación.
El primer single, “Lyla”, publicado en abril de 2005, debutó en el número 1 del UK Singles Chart, reafirmando la vigencia de la banda. Le siguieron “The Importance of Being Idle” y “Let There Be Love”, canciones que combinaron melodías pegadizas con letras introspectivas, mostrando un Oasis capaz de conjugar potencia y sensibilidad.
Don’t Believe the Truth debutó en el número 1 del UK Albums Chart, y alcanzó posiciones destacadas en Europa, Japón y Estados Unidos. Fue certificado platino en el Reino Unido y consolidó a Oasis como un grupo capaz de reinventarse sin perder su identidad, demostrando que incluso después de más de diez años de fama, seguían siendo una de las fuerzas más influyentes del rock británico.
Madurez y despedida
En 2008, Oasis afrontó la que sería su última etapa como banda activa, buscando un regreso al rock más crudo y expansivo. El séptimo álbum de estudio, Dig Out Your Soul, se grabó entre 2007 y 2008 en los Ridge Farm Studios de Surrey y en los The Village Studios de Los Ángeles, bajo la producción de Dave Sardy, quien ya había trabajado con la banda en Don’t Believe the Truth. El objetivo era capturar un sonido más psicodélico y orgánico, combinando la potencia de guitarras tradicionales con arreglos más atmosféricos y profundos.
Publicada el 6 de octubre de 2008 por Big Brother Recordings, Dig Out Your Soul mostró a un Oasis más introspectivo pero manteniendo la energía característica de sus himnos. El álbum debutó en el número 1 del UK Albums Chart, fue certificado oro en el Reino Unido y recibió críticas mayormente positivas, elogiando la cohesión del grupo y el regreso a un sonido más directo y poderoso.
Sin embargo, las tensiones internas que habían acompañado a Oasis durante toda su carrera, especialmente entre Noel y Liam Gallagher, alcanzaron su punto máximo. Durante la gira de presentación del álbum en agosto de 2009, los conflictos culminaron con la salida definitiva de Noel Gallagher, poniendo fin a la banda que había definido una era del rock británico.
La disolución de Oasis marcó el cierre de un capítulo histórico en la música británica. Durante casi dos décadas, la banda había producido siete álbumes de estudio, consolidado himnos generacionales, revolucionado la industria musical y encabezado algunos de los conciertos más icónicos de Reino Unido y del mundo.
Caminos separados
Tras la disolución de Oasis en agosto de 2009, los hermanos Gallagher emprendieron caminos independientes que continuaron reflejando su influencia en la música británica. Noel Gallagher lanzó su proyecto solista, Noel Gallagher’s High Flying Birds, debutando en 2011 con un disco homónimo que recibió elogios por su capacidad de mantener la esencia melódica de Oasis mientras exploraba nuevos territorios sonoros. Su carrera continuó con álbumes como “Chasing Yesterday” (2015), “Who Built the Moon?” (2017) y «Council Skies» (2023), consolidándolo como uno de los compositores más relevantes del rock británico contemporáneo.
Por su parte, Liam Gallagher formó Beady Eye junto a exmiembros de Oasis, publicando “Different Gear, Still Speeding” (2011) y “BE” (2013), antes de lanzar su carrera solista con “As You Were” (2017), un álbum que debutó en el número 1 del UK Albums Chart y fue recibido con entusiasmo por fans y crítica, mostrando su capacidad de liderar un proyecto propio manteniendo la voz inconfundible que lo había hecho famoso con Oasis.
Aunque sus trayectorias se desarrollaron por separado, la influencia de ambos sigue ligada a la historia de Oasis. Sus carreras posteriores permiten apreciar la evolución de sus estilos individuales y cómo cada uno continuó contribuyendo al legado del britpop y al rock británico más allá de la banda que marcó a toda una generación.
El regreso triunfal: Oasis Live ’25
Después de 16 años de separación, Oasis volvió a reunirse en 2025 para una gira mundial que marcó el regreso de los hermanos Liam y Noel Gallagher a los escenarios. La gira, titulada «Oasis Live ’25», comenzó el 4 de julio en el Principality Stadium de Cardiff, Gales, y está programada para concluir el 23 de noviembre en el Estadio Morumbi de São Paulo, Brasil.
La alineación original de la banda se reunió para esta gira, incluyendo a Gem Archer, Andy Bell, Paul ‘Bonehead’ Arthurs y el baterista Joey Waronker. Sin embargo, debido a un tratamiento de cáncer de próstata, Bonehead no pudo participar en las fechas de Asia y Australia, siendo reemplazado temporalmente por Mike Moore, conocido por su trabajo con artistas como Baxter Dury y Peter Doherty, y miembro de la banda solista de Liam Gallagher desde 2017.
Además, la gira ha sido documentada en un próximo filme titulado «Oasis Live ’25», dirigido por Dylan Southern y Will Lovelace, conocidos por su trabajo en el documental de LCD Soundsystem. El filme será producido por Steven Knight, creador de Peaky Blinders, y está programado para su estreno en 2026.
Aunque no se han anunciado planes para nueva música, la gira ha sido un evento significativo para los fans de la banda, celebrando su legado y mostrando que, a pesar de los años, Oasis sigue siendo una de las bandas más queridas y relevantes del rock británico.
