The Ting Tings

Desde Islington Mill al mundo: los orígenes de The Ting Tings
La historia de The Ting Tings comienza en Salford, al noroeste de Inglaterra, donde la escena artística del Islington Mill sirvió de caldo de cultivo para que se encontraran Katie White y Jules De Martino. El dúo, que se formó oficialmente en 2007, rápidamente llamó la atención por su propuesta bailable, descarada y minimalista, influenciada tanto por el pop como por el punk, el dance y el indie.
Katie White, vocalista y guitarrista, ya había experimentado en la industria con TKO, una banda femenina de pop que tuvo un breve paso por el sello de Simon Cowell, mientras que Jules De Martino había formado parte de Babakoto y más tarde de Dear Eskiimo, un proyecto conjunto con White que no llegó a despegar tras problemas contractuales con la discográfica.
El nombre The Ting Tings surgió en ese contexto post-Dear Eskiimo, en un juego de palabras que capturaba la energía del proyecto. Según White, lo escuchó por primera vez de una compañera de trabajo china en el estudio donde ensayaban; en mandarín, “Ting Ting” (亭亭) puede significar “grácil” o “elegante”, aunque el dúo siempre destacó que lo eligieron más por su sonoridad pegadiza que por un significado concreto.
Los primeros pasos: demos, vinilos y el salto a la radio
En 2007, The Ting Tings autoprodujo una serie de temas que circularon en CD-Rs y ediciones limitadas de vinilo, generando un boca a boca alimentado por la escena alternativa y el circuito de festivales menores. Su primer sencillo, «Fruit Machine», fue lanzado en edición limitada a través del sello Switchflicker Records, con tan solo 500 copias en vinilo. El tema, con su combinación de beats juguetones, letras provocadoras y una base casi minimalista, llamó la atención de la prensa y los sellos discográficos por igual.
Pero el verdadero punto de inflexión llegó con «That’s Not My Name», un single explosivo que rápidamente se convirtió en un himno generacional. Inicialmente lanzado como edición limitada, el tema captó el interés de BBC Radio 1, donde comenzó a rotar con fuerza. Su éxito radial y en clubes llevó a que ficharan con Columbia Records, que reeditó el single en 2008 como parte del lanzamiento de su primer álbum.
El estallido de We Started Nothing
El debut de The Ting Tings llegó el 16 de mayo de 2008 bajo el sello Columbia Records y marcó un antes y un después en la escena pop británica de la segunda mitad de los 2000. Titulado «We Started Nothing», el disco condensaba la energía cruda que Katie White y Jules De Martino venían cultivando en vivo desde los días de Islington Mill.
Con una producción a cargo del propio De Martino, y una mezcla final firmada por Dave Sardy, el álbum combinaba el descaro del punk con la inmediatez del pop y el pulso bailable de los sintetizadores, logrando un sonido reconocible desde el primer compás.
El disco fue impulsado por el fenómeno de «That’s Not My Name», un tema que ya había despertado interés en su primera versión limitada de 2007 pero que explotó en 2008, llegando al número uno del chart británico.
A ese primer impacto se sumó la viralidad inesperada de «Shut Up and Let Me Go», cuyo uso en una campaña de Apple llevó el nombre del dúo a las pantallas de todo el mundo. El resultado fue inmediato: el álbum debutó directamente en el puesto número uno del UK Albums Chart y, con el correr de los meses, comenzó a escalar posiciones en Europa y Estados Unidos.
Más allá de los hits, «We Started Nothing» consolidó un estilo: letras cortantes, estructuras simples y una actitud performática que funcionaba tanto en clubes como en festivales. La crítica, aunque dividida, no ignoró su impacto. Algunos medios especializados, como Pitchfork, fueron duros al señalar lo que consideraban una falta de profundidad, pero otros valoraron la originalidad y frescura de una propuesta que no se alineaba con el indie melancólico que dominaba la época.
Una búsqueda sin brújula
Tras el éxito arrollador de su debut, The Ting Tings se embarcaron en la creación de su segundo álbum, Sounds from Nowheresville, lanzado el 24 de febrero de 2012. Inicialmente, el dúo comenzó a escribir en París y luego grabó durante ocho meses en el sótano de un antiguo club de jazz en Berlín. Sin embargo, insatisfechos con el resultado, descartaron gran parte del material, sintiendo que se asemejaba demasiado al euro-pop que dominaba las radios en ese momento.
El álbum, que abarca géneros desde el electro hasta el reggae y el rock, refleja una experimentación sonora de The Ting Tings que, según algunos críticos, carece de cohesión. De todas formas, el disco incluye algunos singles que tuvieron relativo impacto como «Silence», «Hit Me Down Sonny» y «Hang It Up».
A pesar de debutar en el puesto 23 del UK Albums Chart, Sounds from Nowheresville recibió críticas mixtas. Mientras que algunos elogiaron su eclecticismo, otros señalaron una falta de dirección clara. Metacritic le otorgó una puntuación promedio de 52 sobre 100, basada en 30 reseñas. Pitchfork criticó la falta de autenticidad emocional y describió el álbum como una colección de pistas más adecuadas para anuncios publicitarios que para una escucha coherente.
Un giro retro desde Ibiza
Después de la recepción mixta de Sounds from Nowheresville, The Ting Tings buscaron reinventarse. En 2012, se trasladaron a una finca en Santa Gertrudis, Ibiza, donde comenzaron a escribir y grabar nuevas canciones.
Allí, entablaron amistad con Andy Taylor, exguitarrista de Duran Duran, quien se unió como productor del proyecto. Posteriormente, el dúo se trasladó a Nueva York para finalizar la grabación en los estudios Avatar, utilizando equipos analógicos para capturar una esencia más orgánica.
El resultado fue Super Critical, lanzado el 24 de octubre de 2014 bajo el sello independiente Finca Records. El álbum presenta una fusión de disco, funk y pop, influenciado por artistas como Madonna, Prince y Talking Heads. El disco muestra una estética retro y bailable, alejándose del sonido más crudo de sus trabajos anteriores.
A pesar de su nuevo enfoque, Super Critical tuvo un desempeño comercial modesto. En el Reino Unido, no logró ingresar al Top 100 de álbumes, aunque alcanzó el puesto 21 en la lista de álbumes independientes. Los sencillos «Wrong Club» y «Do It Again» tuvieron una recepción limitada, con «Wrong Club» alcanzando el puesto 45 en Japón y el 53 en Bélgica.
Del silencio a la oscuridad
Tras un período de silencio creativo, The Ting Tings regresaron el 26 de octubre de 2018 con The Black Light, su cuarto álbum de estudio. Grabado a lo largo de dos años entre España y Los Ángeles, el dúo adoptó un enfoque diferente al comenzar escribiendo las letras antes de la música, una inversión de su proceso habitual.
Inicialmente, las demos tenían una influencia marcada por bandas como The Smiths y The Cure, pero insatisfechos con el resultado, decidieron reconstruir el álbum en Los Ángeles, buscando un sonido más representativo de su visión artística.
El resultado fue un disco con una estética más oscura y melancólica, alejándose del pop vibrante que los caracterizaba. The Black Light explora géneros como el drum and bass, UK garage e indietronica, abordando temáticas de relaciones complicadas y luchas internas. El álbum fue lanzado bajo su propio sello, Finca Records, y estuvo disponible en formatos digitales y vinilo, sin una edición en CD en el Reino Unido y Estados Unidos.
A pesar de su propuesta innovadora, el álbum no logró ingresar a las listas de éxitos en ningún país. La crítica recibió The Black Light con opiniones mixtas. Mientras algunos elogiaron su intento de reinvención, otros señalaron una falta de cohesión y dirección clara. En 2023, las canciones «Estranged» y «Blacklight» fueron destacadas en una lista de las mejores canciones de la banda, ocupando los puestos 8 y 10 respectivamente.
Un regreso soleado desde Ibiza
Después de seis años de silencio discográfico, The Ting Tings regresaron el 6 de junio de 2025 con Home, su quinto álbum de estudio. Grabado y producido íntegramente por el dúo en su estudio casero en Ibiza, el disco refleja una nueva etapa en sus vidas, marcada por la maternidad y la búsqueda de estabilidad. Inspirados por los sonidos del soft rock y el yacht rock de los años 70, el álbum evoca influencias de artistas como Fleetwood Mac, Steely Dan y The Eagles.
El primer adelanto del álbum, «Good People Do Bad Things», lanzado el 28 de febrero de 2025, marcó un cambio estilístico para la banda. Con armonías suaves y arreglos melódicos, la canción alcanzó el puesto número 6 en las listas de TikTok Music, acumulando más de 650,000 videos en la plataforma. Este éxito viral revitalizó el interés por el dúo, especialmente entre nuevas generaciones de oyentes.
Home presenta una colección de diez canciones que exploran temas de introspección, familia y la búsqueda de paz interior. Canciones como «Dreaming», «Danced On The Wire» y «Song For Meadow» destacan por su calidez y producción orgánica. El álbum fue lanzado de forma independiente bajo su propio sello, Wonderful Records, y está disponible en formatos digitales y vinilo.
Aunque aún es temprano para evaluar su impacto comercial completo, Home representa una evolución significativa en la carrera de The Ting Tings, mostrando una madurez artística y personal que resuena con su audiencia.